viernes, 28 de agosto de 2009

SILENCIO Y RUINA





Y mientras en silencio contemplas aquellas maravillosas ruinas, tu mente vuela libre sin otro límite que la cordura.El silencio nos invita prudentemente a transitar por aquellos caminos tan lujuriosos y creativos que la extravagante realidad tiene para ofrecernos: imaginar.Silencio es huir y permanecer; su esencia subyace en la dialéctica que va del reposo a la acción, nos apabulla con la sabiduría de sus no palabras.Silencio es callar pero también sugerir, casi como intentando decirnos cosas a trabes del matiz de sus miradas.Silencio es invitarnos a exponer nuestras virtudes o nuestros defectos, puede querer que obedezcamos sin más, puede querer que nos revelemos ciegamente, puede querer…Lo más inquietante es su carácter sugerente, y lo más peligroso es aquel aspecto que deja libre a nuestro proceder. Actuar en silencio. Solo actuar.Ruina y silencio.Y las ruinas, exponen en sus ropas lo que alguna ves fue. Como aquel templo del que solo quedan, azarosamente dispuestos, finitos rasgos de su prematura infinitud.Allá a lo lejos en el tiempo, cuando las muchedumbres recorrían los paramos de esta o aquella ciudad, cuando rendían pleitesía a sus formas perfectas. Piedra pura, majestuosa mimesis abstracta de la naturaleza.Formas perfectas y acabadas que sugieren contemplación, sumisión y silencio. Dialogo con ausencia de libre albedrío, el silencio se entroniza triunfante desde su carácter totalitario invitándolos a obedecer sin mas, aquellas formas dogmáticas de la piedra. Donde nada puede agregarse ni quitar, donde la belleza radica en la estaticidad, en el frió azul de la muerte o de un nirvana.Y mas acá en el tiempo, en ese mismo paisaje o en algún otro da lo mismo, donde el tiempo triunfo arrasando sin piedad, que sucede?Ruina y silencio, en una sugerente alianza que se escabulle en oniria y deambula por los pasados distorsionados de algún sector del inconsciente.¿Qué sugiere este silencio? Ese que nos ofrece lo que ya no esta del edificio? Quien responde por aquella piedra mártir?La belleza primigenia se altero, y el caos se hace su festín. El tiempo, bromista y a la vez ladrón, aliado y enemigo del silencio, dos hermanos como Caín y Abel, ejecutan su obra maestra.Y del silencio original, producto de aquella superposicion de columnas y dinteles a este silencio por ausencia, solo restos, meras letras que no intentan articular palabra alguna (o si).Que distinto es este silencio, libre y dinámico, que peligroso es este silencio que vuela al amparo de las alas de la imaginación, que hermoso este silencio esclavo de las alas del deseo.Acá, ante la majestuosidad del silencio y la ruina, el silencio mismo, se dispone a olvidar y a crear, en el mas absoluto y disonante silencio.


AZM
MMV

miércoles, 26 de agosto de 2009

LOS TRES ASPECTOS DEL TIEMPO




De repente se me antoja que las agujas del reloj son los alfileres de un demiurgo.
Así, sus agudos zarpazos son el suplicio de ser un poco mas y no extinguirse tan pronto, expresado en un grito de agonía, del instante que acaba de pasar, de manera que, inexorablemente, su paso desintegra y al mismo tiempo construye el pasado de un orgulloso y viejo pedazo de humanidad, que sentado en su sillón favorito disfruta su vida de holgazán.

Desarrolla el demiurgo su loable tarea mientras el geronte sigue apoltronado fijando la vista en un punto no determinado ubicado en algún lugar perdido en las difusas aguas de la memoria.
Recordaba cosas inútiles alojadas en la papelera de reciclaje de su desvencijado cerebro de cabotaje, más bien intentaba recordar, pues a su edad, lo que pasó o no, habita las desdibujadas fronteras de lo realmente acontecido.

Pero hete aquí, que el Sr. Reloj, que oficia de guarida del demiurgo, poco a poco se queda sin baterías y denodadamente intenta escaparse de su inevitable jaula corporal.

Una ventana se abre misteriosamente y le insufla renovada vida al ambiente, ya rancio y mal oliente pues a veces la senectud es amiga del mal olor.
El demiurgo ya logra respirar, y cansado de este lugar logra por fin escapar.
Su misión acaba de finalizar.
La continuidad del tiempo se manifiesta en tres hechos que ofician de punto de referencia para medir su paciente y eterna marcha: El tic-tac del reloj cu-cu, el goteo de una canilla mal cerrada y el caer de una hoja que anuncia el arribo del otoño, así se presenta cronos, mientras se ríe de nuestra finita condición .


AZM
MMVI

CRONICAS DE PARIS








Entre el cementerio Pere lachaise y el albergue D`artagnan no hay mas que 3 estaciones de metro, unas escasas 10 cuadras en términos absolutamente porteños.
Mi espíritu autodidacta sumado al agrande porteño cínicamente borraba la posibilidad de perderme en una ciudad que solo visitaron mis ojos desde la empañada ventana de un cuadro impresionista. Solo tenía una baga idea de lo que es el metro, gracias a alguna anécdota familiar o lo que recordaba de la película Subway donde se pintaba un deforme espejo, cual familiar que no se quiere mostrar, de la urbe parisina.
Es una ciudad, pensaba, que tan complicado puede ser ubicarse si uno maneja o cree manejar sus códigos, como si ser un simple ciudadano fuera suficiente para comprenderla como una globalidad inequívocamente internacional.
Eso pensaba antes de emprender el viaje.
Pinte en mi cabeza un curioso eje espacio-temporal materializado en dos nodos: Alvear y Telerman, puntos nodales de una afrancesada avenida imaginaria que cruza la historia de la ciudad de Buenos Aires y eso me auguraba un fácil trayecto desde el aeropuerto hasta mi lugar de destino.
Rues du Charone y boulevard de Charone puede ser fácil de interpretar en dos dimensiones por mas que sea extraño toparse con dos calles con el mismo nombre. La fría realidad de la tercera dimensión sumada al desconocimiento del idioma anulaba totalmente la utilidad de un simpático mapa.
La juguetona y “romántica” trama medieval es violentamente cercenada por la pragmática visión de Hausmann.
Mientras, la diagonal roque Sáenz Peña, como un gemelo con diagnostico de enanismo, se encaprichaba en servirme como referencia.

La noche se acerca, las calles y sus habitantes se obscurecen y la meta, casi a punto de convertirse en una función asintótica que jamás llegara a completar su misión.
En vano guiarse por la numeración de las parcelas:
4 8 16 cruzo la primer calle: 24 54 76, (tal vez sean como nuestras manzanas de 50 metros) 5 “cuadras” mas: 94 112.
No es la numeración parcelaria la mejor manera de establecer un patrón de referencia.
Leo el cartel que me indica la calle por la que transito, chequeo con el mapa su ubicación, resultado: ni siquiera reconozco el contorno Pere Lachaise, único gran espacio de referencia dada su cercanía con la rue Vitruve donde paciente me aguardaba el D`artagnan.
Vitruvio: utilitas, firmitas, estilitas.
Yo: perdido, congelado, preocupado.
Contemplando el ocaso del plan B, (el plan A era la intuición de habitante de “la gran medialuna”, si Nueva York es una gran manzana no veo porque BsAs. no pueda asemejarse a una medialuna bañada por un espeso café con leche) busco con desesperación un taxi que no le tenga pruritos a tres frases en ingles para poder llegar a destino.
Lo primero mejor que me pudo pasar en Paris mi primer día fue el haberme perdido, lo segundo mejor, el haber recibido el diploma de ciudadano internacional en el pub del hostel.
Tres días después, al haber vivido la ciudad desde la perspectiva del mochilero pude repreguntarme, a miles de km de distancia, lo que es vivir en una ciudad.
Desde la impunidad de la lejanía, ayudado por la perspectiva, pude comprender que es vivir en una ciudad, cuando me enfrente con lo mismo: calles, gente, publicidad…lo mismísimamente distinto y dramáticamente igual.
Estudiar minuciosamente, sus comportamientos, ver la sangre circular hasta poder ser una célula mas y formar parte del frenesí, escuchar sus diálogos en el subte sin saber lo que dicen pero inspeccionando sus gestos y ademanes, catalogando personajes e imaginado las mil posibilidades que aguardan en cada estación que no fueron pisadas por mis pies.
Trazar analogías caprichosas entre el bd hausmann/Avda de Mayo, Av des Champs Elysses/Libertador, Mont Mart/San Telmo, Sacre Cour/ Parque Lezama.
Establecí recorridos y me los apropie.

Perderse con grata compañía femenina, descansar en cuanta placita vimos para ir conociéndonos mas; subir juntos al arco del triunfo y mirar en al pasado hasta los tiempos de Napoleón lll algún motín revolucionario mientras Haussmann contempla por lo bajo el resultado de su master plan, hasta desembocar en un restaurante comiendo tartiflete avec no-se-que cerca del Moline Rouge luego de maldecir juntos por no encontrar enchufes de tres patitas pero riéndonos de cuanta cosa rara veíamos;
Quedar varados a medianoche en champs de mars a merced de la oscuridad celosamente vigilados y acosados por una extraña, pareja? amigos? dealers? espias? de holandés rengo y un rumano campeón de lucha libre: “Piri! Vino ich!!” vociferaba en rumano a un extraño ser (el holandés), algo mayor, oculto tras bambalinas en un banco de plaza a un costado de la Torre Eifel, “ its veri shy” nos decía a mi amiga, a mi y un trío de simpáticos amigos brasileños pasajeros del mismo hostel
Era ya mas de la 01:00 AM y estábamos a km de distancia del hostel pero con toda una ciudad para ser descubierta de noche. Por supuesto elegimos divagar y terminamos como clochards frente a las puertas del metro esperando la hora de apertura.
Buscar en Mont Mart, donde vivió y trabajo Amelie.

El primer momento de duda inicial, cual caminante de un laberinto, deja lugar a la certeza de saber perderse y poder dejarse llevar por la deriva, con la intención de no regresar a uno mismo en el mismo punto de partida.
Les Champs Elysses, embebido en la neuronal trama parisina desemboca en la defense donde pasa a dominar la composición urbana enmarañándose con una versión de la ciudad medieval adornada con los ropajes de acero y vidrio del s XXI .
El desarraigo de la línea recta ahora domina la composición pero aliándose con la, ahora si, totalmente peatonal organicidad. Ambas posturas urbanas: ortogonalidad y organicidad pueden convivir en armonía en extramuros, Puerto Madero se me viene a la cabeza y su irresuelto límite horizontal materializado por la pesadez de la Av. Madero.

Y me quedo pensando en el dialogo entre lo moderno y lo antiguo que queda muy bien expresado en La Defense, y su curioso matrimonio entre La Cite y Haussmann. Defense. Entre lo planeado y lo espontáneo, entre lo orgánico y lo racional.
Entre lo multicursal y lo pluricursal, ese híbrido amorfo que es una ciudad.
Y no puedo dejar de notar lo bueno que me salieron las cosas y lo mucho y mejor que conocí cuando menos estuve subordinado a un plan.
AZM
MMVII

LA PROXEMISTICA TIMIDEZ DEL SER




El
Ella

El anfitrion

El omnipresente

Las burbujas
El todo

Donde en medio de un sinfin de manifestaciones, El logra hacer foco en Ella desplazando al Anfitrion, actor principal de la obra, a una mera funcion de decorado; las burbujas son aquellos promontorios del mar de la densidad y desde el cual, de una de ellas, se alza justamente Ella.
Donde el enemigo a vencer es el Omnipresente ente que rige y fiscaliza todos los actos a realizar por aquellas manifestaciones que pueblan esa noche.



Esperando el momento indicado, avanzando al objetivo, al mundo entre los mundos.
Diversidad de guiones que van armando sus discursos, tan distinto al convencional pero sin el cual jamas podria haber existido.
Una noche donde podia darse el momento de romper ciertos limites.
Un pequeño paso, biologicamente hablando, un gran paso para su interior.

Se han formado, y como burbujas que salen de un mismo origen pero buscan su independencia se dispersan por el ambiente para dar con aquella arquitectura que les satisfaga.
Se han formado los grupos.
Ya no mas la masa informe que navegaba en el caos; se divisa ya la gran red.
Dentro de ella, entre sus nodos se superpone aquella otra : la de las individualidades, aquella que busca los flancos debiles para inmiscuirse, que busca romper la barrera ,ficticia?,que separa esos dos mundos.
Su cara asoma, su vista gesticula, su silencio sugiere; pero su entorno monta guardia.


Un entorno que es seducido y que teje una alianza silenciosa con la omnipresente, invisible, intangible entidad que todo lo mira, que señala y que acusa. Que fiscaliza.

El aire esta tenso, una gota de transpiracion salpica el campo de batalla; los ojos miran hacia aquel personaje, ahora principal.

El anfitrion hace mutis por el foro.

Una batalla que comienza, la mas dura, contra el omnipresente.
Su espada muestra en el reflejo de su filo las lastimosas imagenes de una derrota futura, pero es una derrota que puede ser ficticia

Ella conversa, mira pero no sabe.
Si hay alguien mas, ya no importa; su presencia adquiere un protagonismo inusitado y opaca a nuestro tan esperado anfitrion.
Solo dos figuras se alzan en esa noche, tan lejanas pero tan cercanas.
Se realizan rodeos, se planean estrategias; se tejen palabras que luego seran descartadas. Triunfan las inhibiciones y los prejuicios.
AZM
MMV

NO TAN DESOLADOR



Llegue a esa playa durante un invierno mas, el paisaje me devolvía una imagen no tan desoladora como uno podría llegar a pensar.
Analogías?: una fiesta durante el epilogo de su existencia, solo fantasmas y restos piadosos de distintos recuerdos. Armamento para un mundo onírico.
Una postal de parejas dormidas al amparo de sus expectativas, un solitario acodado en la mesa de una barra ya vacía, un piano que ya no sabe cuando dejo de ser tocado, una melodía que aun suena como un viaje de mil victorias.
Una noche, un loop sin cesar que espera que alguien diga vasta.
Así se presenta la playa, el agua sigue su curso aunque nadie se deslice en sus abrazos, la arena despide sus esquirlas en una danza ritual junto a su pareja llamada viento.
Hay sol, si; ese día, sus rayos, ahora tímidos bañan las ropas de los que se animan a presenciar las cosas cuando ya no son. Testigos de la evaporación de una temporada que ya dejo de tocar su canción.

Intente caminar sobre una formación rocosa, una escollera perdida en el agua de lo que alguna vez fue, pero bien amarrada a la soledad del presente.
La mejor opción par no caerse entre sus discontinuas formas era dejar llevarse por nuestro instinto primal. Abandonarnos a nuestra intuición y dejar que el mono que habita en los subsuelos de la evolución, en el enésimo sótano del inconsciente, guíe erráticos pasos.
Es la única manera. Mientras, el presente nos llama a desenterrar los fragmentos del verano que ya paso, pero que en su más pura esencia volverá.
Verano que se presentara vestido con los ropajes del mañana.
Mañana que se encuentra probando su vestuario, intentando sorprendernos con alguna revelación, pero siempre tan sutil.
Desperdigando en sus enseres ciertas pistas para indicarnos que no todo es tan nuevo como parece que es.


AZM
MMV

PROMETEOS Y DESTINO




Alegría de ver el sol que en la mañana estalla en esquirlas de sabiduría como regalo tardío de un Prometeo que burlo el castigo de los dioses.Abro el gran ventanal que separa el adentro y el afuera y me paro en el alfeizar para saludar su magnificencia, tengo mis manos ocupadas, un libro reposa en mi siniestra, un vaso con agua que se consume poco a poco, en mi diestra.Solo, estoy frente al sol que también me daña pues el saber duele y pienso en el castigo, pues prometí no inmiscuirme en asuntos inherentes al corazón.Soy pura razón. Un mero, mísero y mecánico devenir que quiere sepultar sus pecados bebiendo de la pureza del agua y absorbiendo la áurea castidad del sol.Dejo fluir mi mente para ser mártir de mi mismo, el sol me da fuerzas y estrujo el vaso hasta convertirlo en puras esquirlas transparentes que reflejan y refractan todo mi pasado y futuro.No hay presente en mi pues siquiera sé si estoy y como un fantasma del tiempo que fui vomitado a una realidad que el vulgo denomina presente, yo solo divago y devengo en mismo, en un loop eterno e incesante como un abisal acorde que es un eco próximo del big-bang.Mi mano esta levemente teñida de roja y sopeso mis acciones producto del pecado de inmiscuirme con los demás, y Ella que no se si ya esta.En mi, la ansiedad es muy amiga del descontrol y dirige mis propios actos y me penetra susurrándome al odio propuestas teñidas del color de la fruta prohibida haciéndome diagramar mil futuros, todos utópicamente tristes o alegres.Y es que mi mayor virtud, es poder predecir todas las consecuencias posibles de mis actos, poder leer todo lo que me va acontecer, tal es mi castigo por beber de la fuente prohibida para mí.Miro mi mano derecha: sangre y un errático trozo de vidrio que dulcemente me mira desde su filoso promontorio donde el otro Prometeo, olvidado por los Dioses pero no por mi, me guiña un ojo.Miro mi mano izquierda que sostiene el libro que llevo encadenado a mis muñecas desde el día que tengo uso de razón.Miro mi ser replicarse en millones de partes, cuervos caníbales que comen de mi carroña aunque no sea más que un acto puro de orgía autofagica.Soy uno con las ruinas que decoran los vastos dominios de mi mansión y poco a poco temo ser olvidado por mis dioses internos.La sangre que mueve el cuerpo será la sangre que riegue el jardín de mis dominios para que las flores sean rojas, lujuriosamente provocativas y llenas de vida.

AZM
MMVII